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Disolveré la tinta de los verbos
Y con los trazos mudos
allano al horizonte con tu imagen.
Entre el reflejo y la infinita tarde,
vaciaré mi coraje.
Y todo se sucede:
un feroz movimiento.
Acaso no quisiera la sequía,
ni la sed, ni tu nombre.
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María T.
lamentablemente hay nombres que nos re-bautizan. se vuelven nuestros propios nombres. y nos gustan, y nos duelen y nos llevan,... y los cargamos...
ResponderEliminarhermoso rincón.
amenazo volver :-)
He tenido que abrir el vientre de las palabras para buscar en ellas las adecuadas. Las he alineado y en las junturas, en esos pequeños resquicios que las separan, dejar el atestiguamiento de mi complacencia por tus versos.
ResponderEliminarGracias por tu poesía.
Un abrazo.
Hola emily..con la sangre de tu nombre tatuaré la luz de mi sombra...que bellas letras amiga...gracias, pasa buena tarde,besos amainados...
ResponderEliminaral disolverse quizá no.
ResponderEliminarnada de amenazas Clo!, vuelve..:) gracias por pasar..
ResponderEliminarJulio Diaz-Escamilla gracias, sabes que te admiro!
don vito andolina eres un sol:)
David C. quizá...!!(gracias por tu visita)